Bienvenid@ a Regazo Fotografía, fotografía documental de partos y familias en Cantabria

Parto de Carlota

12/2017

Diciembre
Hace frío pero hay una luz preciosa
En el cielo, un tímido arcoíris

En la casa se ha detenido el tiempo
Se siente la fuerza de la vida
La calma del momento

Bienvenido, Leo

Recomendaría a Luna sin duda alguna a todas las familias que quieran tener un recuerdo inolvidable del nacimiento de sus hijes, por su profesionalidad y el cuidado y el amor que pone en su trabajo.
Carlota
Blanco y negro. Carlota, en la piscina de partos, abraza contra su pecho a su bebé recién nacido que da un lloro con su carita arrugada y la boquita abierta
Blanco y negro. Carlota, en la piscina de agua clara, mira a su bebé de cabecita oscura por la gran cantidad de pelo
Carlota, dentro de la piscina, sostiene al recién nacido y lo mira sonriente mientras por detras su pareja la abraza y mira también al bebé. La piel del bebé muy sonrosada y su cabecita oscura resaltan sobre el cuerpo de Carlota.
Blanco y negro. El bebé es sostenido por los brazos de su madre, aún en el agua que brilla por los reflejos y deja ver el cordón umbilical sobre el pubis, pues aún no ha alumbrado la placenta
Primer plano de Carlota y su bebé desde su espalda, por encima de su hombro. Se ve la carita fruncida del bebé, con los ojos cerrados, el pelo mojado, la piel sonrosada y sus pequeños deditos arrugados
Carlota acaricia a su bebé descubriéndolo, ya tapado con una toalla naranja aunque aún en la piscina, y de fondo el papá mira a su bebé con una dulce sonrisa
Carlota mantiene abrazado al pequeño bulto contra su pecho, acercando el rostro a la cabecita quizás para besarlo. Bajo la toalla la cabecita asoma y se ven un ojito curioso
Blanco y negro. Primer plano de Carlota mirando a su bebé que también la mira
Blanco y negro. Apoyado tras una sonriente Carlota, en el borde de la psicina, Manel se asoma sobre el hombro de ella para mirar al bebe que descansa apoyado en el pecho de su madre. La gran mano del papá roza suavemente la coronilla del pequeño Leo
Imágen captada a través del espejo de la pared. Manel apoyado en el grueso borde de la piscina acaricia la cabecita del bebé rodeando con su largo brazo a Carlota.
Carlota sonríe mientras Leo encuentra el pezón y comienza a mamar.
Blanco y negro. Mientras Leo empieza a mamar, Carlota mira feliz a su compañero
Primer plano del recién nacido mamando, sus ojillos dirigidos hacia su madre
Por encima del hombro de Carlota se ve a Leo apoyado en el pecho de su madre, mirándola fijamente con el puñito junto a su cara
Blanco y negro. En medio de la piscina Carlota se incorpora en cuclillas, sosteniendo al bebé envuelto en la toalla. En las aguas claras flota un termómetro en forma de patito.
Plano en picado. Vemos al bebé sujeto por Carlota con un brazo. Los piececitos arrugaditos sobresalen bajo la toalla y bajo el agua las piernas de Carlota
Plano desde arriba. Se ve casi toda la piscina y a Carlota sentada con su bebé en brazos. Los cuerpos desnudos a excepción de la toalla para guardar el calor del bebé. El cabello pelirrojo de Carlota recogido en un moño alto con una pinza. El agua ligeramente amarillenta
Blanco y negro. Carlota mira feliz a su hija mayor que acaba de llegar y conoce a su hermanito asomada a la piscina con su padre al lado
Blanco y negro. Picado desde arriba. Fuera de la piscina, Carlota se ha sentado en una silla de partos con una toalla blanca sobre los hombros y su pebé pegado contra su cuerpo. El equipo de Dar a Luz y Manel observan acuclillados con una linterna los genitales de la mamá para el alumbramiento de la placenta
Blanco y negro. Manel abraza a su hija mientras ésta le rodea el cuello con sus manitas, pegadas sus frentes, y al fondo se ve a la abuela; la madre de Carlota que estaba cuidando de la niña durante el parto
Carlota está tumbada en el sofá con su bebé mientras la matrona le inpspecciona su vagina, alumbrada por su compañera. Manel observa de pie con su hija en brazos. En el suelo un gran tupper contiene la placenta aún unida por el cordón al bebé
Carlota, sentada en el sofá sobre un empapador, mira a su bebé sobre su pecho, arropado con su toalla blanca. Como aún no han cortado el cordón, esperando a que deje de latir y pase toda la sangre que necesita el bebé, junto a ella se haya un gran recipiente con la placenta de un color rojo oscuro. A su derecha su hija los observa con interés
Blanco y negro. Madre e hija se miran riendo, sentadas en el sofá, mientras Carlota sostiene al pequeño Leo contra su pecho
Carlota besa en la mejilla a su hija que se ha acercado a abrazarla mientras mira a su nuevo hermanito en los brazos de su madre
La madre de Carlota abraza a su nieta mientras conversan sentadas en el sofá. Ambas tienen el pelo casi blanco
Leo mama en el regazo de su madre,arropado con una toalla blanca, mientras Carlota coje un vaso de agua. En el sofá un plato con un pedazo de empanada para recuperar fuerzas
Todos rodean a Carlota y su bebé, haciendo un semi círculo. Su madre sentada también en el sofá, con la cabeza apoyada en su mano, mira a su hija. Acuclillados en el suelo Manel y las matronas de Dar a Luz. Y su hija, bien cerquita de ella, la coje la cara con las manitas para darla un mimo. Iluminadas por la luz de la ventana, sus caras pegadas, parecen estar al márgen del mundo.
Blanco y negro. El pequeño Leo estira sus manitas contra su carita. Pegado al pecho de su madre desde que ha nacido
Blanco y negro. Sentada en el sofá Carlota sonriente mira a su bebé mientras la matrona le mide la tensión
Carlota y su madre charlan en el sofá mientras Celia dibuja en un cuaderno entre las dos. Carlota bebe un batido de fruta rojo y por las ventanas entra una luz suave
Carlota sostiene al pequeño Leo en su regazo, piel con piel. Manel se dispone a cortar el cordón que ya no late y se ve blanco,  Leo con los ojos abiertos parece ser consciente de este acto. Junto a Carlota el recipiente con la placenta rojo oscuro que brilla por la luz de la ventana.
La matrona sostiene el cordón recién cortado y muestra a Carlota y Manel la vena y las arterias que lo componen, en el centro de la imágen Leo con los ojos abiertos y mirada rasgada parece mirar también su cordón.
Blanco y negro. De pie, con el torso desnudo, Manel sostiene a su bebé haciendo piel con piel y mirándolo tiernamente
Manel, reclinado en el sofá, sostiene a Leo envuelto en una toalla azul. Lo observa sereno, ¡se le ve tan pequeño entre los brazos de su padre!
Blanco y negro. Leo se despereza sobre el brazo de su madre. Se aprecian las arrugas, el vello y el pelo de la cabeza que empieza a secarse
Blanco y negro. Manel juega con la pequeña Celia con un cepillo del pelo. Sentados en el sofá ríen divertidos
Leo, en el regazo de Carlota, es arropado por un pañuelo con los colores del arcoíris, arcoíris que lució el cielo esa misma mañana, bebé arcoíris es el que llega tras haber sufrido la pérdida de un anterior hijo